Un día te encuentras en una situación económica urgente e inesperada y consideras la idea de lanzarte como bailarina exótica o teibolera. O tal vez buscas ganar un extra para acompletar tus ingresos mes a mes.
Posiblemente hayas sufrido una ruptura o un abandono de tu pareja, quien se hacía cargo de buena parte o de la totalidad de los gastos de las casa. O tienes que atender más obligaciones familiares porque ahora eres madre soltera, tu papá perdió el trabajo, tienes un familiar cercano enfermo, o te has endeudado demasiado.
Tal vez tu caso no sea ninguno de estos, así que posiblemente tengas en mente un proyecto que quieres materializar, ¿no es así?
Un negocio para independizarte puede ser un magnífico argumento. O no sé si pretendes juntar dinero suficiente para terminar la hipoteca de tu departamento, o comprarlo en efectivo, o liquidar el préstamo del automóvil.
Probablemente tienes una magnífica oportunidad para empezar ese negocio soñado pero simplemente no lo puedes hacer porque no tienes el dinero, ni quien te lo preste, ni tampoco quien se asocie contigo.
¿No? Hmmmm…. Bueno, entonces tampoco sería extraño que hayas estado buscando opciones de trabajo convencionales donde te ofrecían ingresos modestos y condiciones laborales muy exigentes.
Ya sé! Tal vez hayas terminado tu carrera y no te han contratado por que no tienes experiencia. O la flamante oficina de gerencia que pretendías se transformó en un empleo de archivista en un cubículo pequeñito a cambio de poco ingreso y una gran frustración. O recortaron el personal de la empresa donde trabajabas hasta hace unos meses.
Ok, ok…tu caso no es de tipo económico. ¡Ah! Entonces tú lo que buscas es sentirte sensual, erótica, deseada, admirada y codiciada por los hombres. Deseas sentirte más segura y con mayor capacidad de seducir, manipular, y controlar a los hombres. Quieres aprender…o vengarte…
Finalmente sea por un motivo o por otro, lo cierto es que te has dado cuenta o tienes la impresión de que atraes a los hombres, que tienes un físico poderoso, que emanas sensualidad. Te asedian en la calle, en la escuela, o en la oficina. Te ves en el espejo desnuda, y pues no es para menos, si tienes una figura envidiable. Tus muslos, caderas y trasero serían un hit; una limpieza facial, un maquillaje adecuado, un corte de pelo nuevo, y un vestuario sexy te dejarían ¡maravillosa!
Así que piensas:
¿Por qué no lanzarme como bailarina exótica en un table dance?
Bueno, tú tienes poderosos motivos y razones para trabajar como bailarina stripper, y eso es lo que debe importar. Solo te recomiendo que lo pienses bien, y que lo hagas bien, porque tal vez después de todo, ser bailarina stripper no sea una buena idea para ti.
Te aconsejo que tengas muy presente que trabajar como bailarina exótica seguramente ayudará a atender tus razones, pero que debes analizar muy bien el costo/beneficio de hacerlo.
Aunque en algunos casos puede haber un costo en términos familiares o sentimentales, hay uno sumamente importante que es la inversión en la actividad que hayas hecho con anterioridad a tu decisión de empezar como teibolera.
He conocido a muchas chicas que están estudiando una carrera, y pues trabajar en el club para hombres lo toman como una ayuda para concluir sus estudios, así que después de un tiempo lo dejan y punto. No es problema.
Algunas otras tienen un negocio y pues como sus ventas han ido mal, pues igual se incorporan como bailarinas exóticas; luego cuando su negocio mejora se salen y punto. No es problema.
Una que otra necesitan algo de dinero para lograr algún objetivo inmediato; igualmente arrancan como bailarinas un tiempo y luego se salen. No es problema.
Y desde luego aquellas que han decidido dedicarse profesionalmente como bailarinas y hacerlo su oficio durante tal vez 10 años, pues tampoco representa ningún problema.
¿Pero en qué caso sí es un problema entrar a trabajar como bailarina exótica? Bueno, pues cuando se tiene un ALTO PERFIL. Y para eso, nada mejor que ilustrártelo con la historia de Sasha.
El Caso Típico Para No Ser Bailarina Table Dance
Sasha me buscó fue para darle mi opinión sobre su potencial para incorporarse a un club stripper. Me dijo que era bailarina, así que yo supuse que tendría alguna experiencia como bailarina haciendo striptease, o como go-go dancer, o como maestra de jazz, hawaiano, o tahitiano; o bueno, tal vez fuera bailarina de belly dance o danza árabe.
Pero me equivoqué.
Cuando nos vimos, y mientras ella se despojaba de su ropa porque quería que yo fuera muy crítico con su potencial, mientras veía su esbelta figura desnuda, sonó su celular.
Mientras tanto le ofrecí una bebida, y conforme se la servía escuché que hablaba con una gran fluidez ¡en ruso! Cuando terminó su conversación le pregunté si tenía familiares rusos, a lo cual me contestó que no.
-¿Entonces cómo es que hablas tan fluidamente el ruso? – le pregunté.
-Lo que sucede es que viví 4 años en Moscú porque estudié en una Academia de Ballet allá. Actualmente formó parte de la Compañía Nacional de Danza de bellas Artes, y estoy en la puesta del Lago de los Cisnes y El Cascanueces de Tchaikovsky en el Auditorio Nacional – me respondió.
-A ver preciosa, déjame comprender. ¿Tú eres una bailarina profesional de ballet, con un arduo entrenamiento que has llevado durante 20 años de tu vida; formas parte del grupo más selecto de bailarina del país; éstas expuesta a la admiración de miles de personas; y tu vida gira en torno a la clase cultural más exigente de México? ¿Sales en promocionales, medios impresos y televisivos, y haces giras nacionales e internacionales? – le pregunté mientras apreciaba su esbelta y firme silueta desnuda, y su bella y armoniosa cara.
-Pues sí. – dijo ella.
-Sasha, yo imagino que la disciplina que requieres como bailarina profesional de ballet es sumamente estricta. También me imagino que el nivel de desgaste físico y la demanda que tienes en todo sentido cuando te vas de gira o estas en temporada debe ser altísimo. Así que explícame porque pretendes meterte a un teibol para trabajar como bailarina exótica. – le pedí.
-Es que necesito dinero. – me dijo Sasha.
-Está bien Sasha. Con tu figura y con tu hermosura más tus habilidades en danza, eso seguro que lo vas a obtener, pero ¿te das cuenta de todo lo que estas poniendo en riesgo? ¡Absolutamente todo por lo que has trabajado durante 20 años! Y que pocas, muy pocas personas consiguen. Basta con que alguien te reconozca para que se comprometa tu prestigio y que empiece tu caída. Y si eso sucede dudo mucho que se pueda detener. Tu carrera profesional ser irá por la borda. En el trabajo de teibolera necesitas tener un BAJO PERFIL. – le recomendé
-Creo que tienes razón – reconoció Sasha después de reflexionarlo durante algunos minutos.
Así que a tí te aconsejo que primero determines si tienes un alto perfil o no, antes de pensar en entrar como bailarina exótica. A veces atender tus motivos no es conveniente hacerlo a cualquier precio.
Y es que ser teibolera, simplemente no es para todas.